Imagen portada de Gioele Fazzeri
No es de sorprender que, pasados unos cuantos años, cuando vuelves a ver una película que recuerdas que te gustó, le encuentres significados más amplios y veas más de lo que fuiste capaz de asimilar la primera vez que la viste.
Eso mismo me ha pasado con esta película, la cual recordaba haberla visto más de una vez de jovencita y haberme emocionado cada una de esas veces. Sin duda es una película que siempre resonó en mí, pero después de verla recientemente he podido ver más allá de lo que era capaz de comprender en aquel momento. Está llena de contenido espiritual, y no sólo espiritual, sino energético y de la ley del Uno.
¿Te habías parado a ver esta película de nuevo?
Sinapsis:
En un pequeño pueblo norteamericano, cuando el sherif Barnum investiga el fallecimiento de un anciano, descubre a su nieto adolescente viviendo en su granja. Se trata de Powder, apodo que le dan por su extraña apariencia, ya que es albino, sin cabello y con una mirada fuera de lo común.
El chico ha vivido al margen del resto del mundo, que sólo conoce a través de los libros que ha leído. Al morirse su abuelo, que era el único pariente que le quedaba, lo envían a un orfanato donde tendrá serios problemas para integrarse.
Su extraordinaria inteligencia y su dominio de poderes sobrenaturales como la telepatía o la telekinesia, provocarán reacciones entre los habitantes de su pueblo…
Os dejo por aquí el trailer: